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Hoy es el día mundial del asma, enfermedad que afecta principalmente a las vías respiratorias que se estrechan e inflaman, produciendo dificultad respiratoria, pitidos, opresión en el pecho y excesiva tos durante la noche y en las primeras horas de la mañana.
Su causa suele ser hereditario por uno de los padres, por varias infecciones respiratorias durante la infancia, o por alergias que suelen estar muy presente en los pacientes con asma, apareciendo ambos problemas en más del 80% de los pacientes asmáticos, sobre todo al polvo y polen.
Sus síntomas empeoran cuando la persona está en contacto con pelo de animal, polvo, polen, moho ambiental producido por humedad, humo del tabaco, estrés, cambios de temperatura principalmente pasando de un ambiente agradable a una temperatura fría o en estaciones donde abunde el frio, la práctica de ejercicio, al igual que cuando la persona está pasando por periodos de estrés, tristeza, preocupación.
Esta enfermedad se suele presentar a menudo con ataques asmáticos, principalmente cuando la persona está en contacto con lo dicho anteriormente, y empezara sintiendo molestias en el pecho, dificultad respiratoria, una necesidad de toser constantemente, sentirá el pulso acelerado, sudoración y puede acabar también con un ataque de ansiedad.
Su tratamiento se basa en tener cuidado de no estar en contacto con lo que desencadena la alergia, y una vez producido el ataque se trata con medicamentos como los corticoides que ayuden a desinflamar las vías respiratorias, junto a los inhaladores de rescate que la persona deberá usarlos cuando empiece a sentirse mal, o antes de hacer ejercicio.
Si después de un tiempo prudencial vemos que la persona no ha mejorado e incluso está peor, acompañarla a un centro médico ya que seguramente necesitara una mascarilla de oxígeno e igual medicación intravenosa.
El paciente con asma puede hacer vida completamente normal, lo único que debe de tener cuidado de tomar las medidas preventivas si sabe que va hacer ejercicio, o que va a ser inevitable estar en un ambiente con alguno de los elementos alérgicos, que es echarse el inhalador media hora antes de la acción, avisar de su problema las personas que le rodean por si empeora, y sobre todo en invierno tener cuidado con los catarros ya que estos desembocan muy fácilmente en bronquitis y con ello empora todos los síntomas de manera notable.
